Jerusalén, primer lugar en el mundo en celebrar la Vigilia Pascual

2021-04-03 10:05:19
“No tengáis miedo. Sé que buscáis a Jesús crucificado. No está aquí. Ha resucitado, como había dicho, venid a ver el lugar donde fue colocado”. Ese acontecimiento narrado por los evangelios sucedió precisamente aquí, en este lugar, donde hoy se erige la Basílica del Santo Sepulcro, en Jerusalén. En este lugar santa la vida ha resucitado, la tristeza ha dejado paso a la alegría, el miedo, a la esperanza y así podemos proclamar que Cristo vive, que ha resucitado tal y como había predicho. El canto del Gloria se entona al principio, porque Jerusalén es el único lugar del mundo en el que la Vigilia Pascual tiene lugar por la mañana, y por ello se considera la “madre de todas las vigilias”. Mons. PIERBATTISTA PIZZABALLA, ofm Patriarca latino de Jerusalén “Aquí en Jerusalén celebramos la Vigilia Pascual como antiguamente, no el sábado por la noche, sino por la mañana, porque así era la tradición antigua, que más tarde el status quo conservó y que no podemos cambiar. Me gusta pensar que Jerusalén es el primer lugar del mundo donde se celebra la Pascua, y que desde aquí llega a todo el mundo, porque el anuncio de la Pascua sale desde este sepulcro vacío.” Mons. Pierbattista Pizzaballa, patriarca latino de Jerusalén, presidió la celebración en la que participaron franciscanos, religiosos y cristianos locales. En su homilía resaltó tres verbos contenidos en el Evangelio proclamado: El primer es comprar. Las mujeres, testimonios de la resurrección tuvieron la “capacidad de resistir al dolor, de ir más allá del aparente fracaso y no dudaron en gastar dinero en comprar lo necesario para honrar a Jesús”. El segundo verbo citado por el patriarca fue ‘ver’, subrayando que “en los evangelios no hay descripciones del acontecimiento de la Resurrección, sino que solo se muestran los signos de esta, los encuentros con los testimonios y, finalmente, con el mismo resucitado. Y por último hace referencia al verbo ‘ir’, diciendo: “Para ver y testimoniar al Resucitado es necesario en primer lugar moverse”. Mons. PIERBATTISTA PIZZABALLA, ofm Patriarca latino de Jerusalén “Hemos vivido un año marcado por el miedo, mientras que el Evangelio de hoy nos dice: “No tengáis miedo”. El miedo con todas sus vinculaciones: la muerte, la parálisis, todo cerrado. Pero el Evangelio de hoy nos dice que miremos adelante, la Pascua es un anuncio de alegría, la presencia del amor, de la esperanza entre nosotros. Debemos tener esperanza en que, a pesar de todo, Cristo ha vencido al mundo y nosotros con él”. En esta celebración, llena de símbolos, se bendice el fuego ante la piedra de la unción y se graba una cruz en el cirio pascual. Después se enciende con la llama procedente del Santo Sepulcro, iluminando las velas de todos los participantes. En la Liturgia de la Palabra se leen siete lecturas del Antiguo Testamento, alternadas con salmos responsoriales y oraciones. El Evangelio se proclama ante el Edículo, lugar de la tumba vacía de Jesús. Finalmente, está la bendición del agua, seguida por la renovación de las promesas bautismales y la aspersión del agua bendita. Al término de la celebración, todos los cristianos de Jerusalén pueden testimoniar que Cristo vive, ha resucitado, ¡aleluya!
A cada paso, a cada latido: San Nicolás, peregrino
A cada paso, a cada latido: San Nicolás, peregrino

San Nicolás Peregrino es un niño griego nacido en 1075, que conoció a Jesús con ocho años y al verlo recibió de él la oración de su corazón. Fue venerado como santo por los católicos y permaneció así durante aproximadamente nueve siglos. En 2023, los griegos ortodoxos de Italia lo incluyeron en su calendario litúrgico. Un santo verdaderamente ecuménico, que tiene tanto que decir a los peregrinos que hoy llegan a Jerusalén. Su vida está escrita en el libro de Mons. Natale Albino, diplomático de la Santa Sede.