Según una antigua tradición, bastaba con que unas gotas de la leche con la que se amamantaba a Jesús cayeran al suelo para que esta gruta de la ciudad de Belén quedara completamente blanca. Según otra tradición, fue aquí donde la Sagrada Familia encontró refugio de la furia del rey Herodes. Fr. FRANCESCO PATTON, ofm Custodio de Tierra Santa "Según la tradición, la Gruta de la Leche es el lugar donde se refugió San José con la Virgen y el Niño Jesús y, podemos decir, incluso temporalmente escondido. A esta tradición se añadió una segunda, la que da nombre a la cueva - la Gruta de la Leche-, según la cual en esta parada la Virgen María comenzó a amamantar al niño Jesús -que evidentemente tenía hambre-, algo de leche cayó sobre la roca, y la roca se puso toda blanca." La Gruta de la Leche se encuentra a unos 200 metros de la Basílica de la Natividad, el lugar del nacimiento de Cristo. En la fachada de la gruta, en la parte superior, hay una representación de María amamantando al niño Jesús. Luego, al descender la escalera de acceso, nos encontramos frente a una imagen que representa a Jesús, María y José huyendo a Egipto. Además de estas, otras imágenes hacen referencia al paso de la Sagrada Familia por este lugar. El polvo blanco extraído de la cueva es utilizado por muchas familias. Fr. ENRIQUE SEGOVIA, ofm Guardián de la Basílica de la Natividad "La gente viene aquí y toma un poco de esta “leche en polvo”, porque realmente quiere el milagro de convertirse en familia, ser madre, tener un hijo o una hija... Recogemos los testimonios de los muchos milagros en la estancia que tenemos al lado." Al fondo de la cueva hay una capilla de adoración perpetua. Y en el exterior doce paneles explicativos cuentan la historia del lugar. Fr. ENRIQUE SEGOVIA, ofm Guardián de la Basílica de la Natividad "Hace dos años inauguramos estos paneles, que cuentan un poco de nuestra historia desde el principio hasta hoy: los instalamos porque tenemos que ayudar a los peregrinos que vienen aquí a entender el significado de este lugar, y para ello se han traducido en diferentes idiomas. Aquí también hay un lugar donde se adora el Santísimo Sacramento, que las Adoratrices del Santísimo Sacramento cuidan, dedicándose a la Adoración Perpetua para las diferentes necesidades que tenemos." En esta Gruta donde se detuvo la Sagrada Familia, se celebró una misa en honor al patrón de la Iglesia en este año dedicado a él por el papa Francisco. Fr. Francesco Patton, custodio de Tierra Santa, presidió la celebración y en su homilía se refirió a los muchos que, como José, se refugiaron en estas tierras: "José -explicó el Custodio- se encuentra en la misma situación que muchos de nuestros cristianos de Tierra Santa, Gaza y Belén, Siria, Líbano e Irak, pero también de muchos otros países de Asia, África y América Latina: También huyen, no por elección sino por necesidad. Ellos también están en el exilio porque se ven obligados a buscar trabajo en otro lugar. Fr. FRANCESCO PATTON, ofm Custodio de Tierra Santa "Sabemos que hoy hay millones de personas, tanto aquí en Oriente Medio como en otros países del mundo, que se ven obligados a emigrar por las dificultades, por las guerras, la economía, la falta de trabajo, la inseguridad personal y de su familia, ante las inciertas perspectivas de futuro. Por eso San José se convierte para nosotros, en cierta medida, en la imagen actual de las muchas familias y de los muchos padres obligados hoy a dejar su tierra para cuidar a sus seres queridos." Franciscanos, religiosos y cristianos locales se reunieron para celebrar los 150 años desde que San José fue declarado Patrón Universal de la Iglesia, quien con corazón de Padre protegió al Niño Jesús y a su madre en esta gruta de Belén. Read More