SUAD HABASH Anciana residente en la Sociedad Antoniana "Estoy muy triste. Las religiosas siempre han estado con nosotros y nos ayudaban diariamente. Ahora están contagiadas de COVID-19. Pido a Dios que les conceda la curación y les deseo paz y bien a todos porque estamos muy cansados." Con la difusión de la pandemia en la gobernación de Belén, y a pesar de las medidas de precaución adoptadas durante este año por la Sociedad Antoniana para proteger a los ancianos, Sor Caterina Tashman, de la Congregación de Hijas de María Santísima del Huerto, no se ha librado de la infección. Maravilloso ejemplo de generosidad al servicio de los pobres entre los más pobres, ha desarrollado su misión humanitaria con sacrificio, paciencia y lealtad. SUZY HAZINE Coordinadora Sociedad Antoniana "Declaramos el estado de emergencia y cerramos la casa a los visitantes. La entrada se reservaba a casos de emergencia, y la situación parecía ser bastante buena. Identificamos el primer caso de la nueva variante entre los ancianos y, en pocos días, se difundió. Hoy tenemos 12 empleados y 15 ancianos contagiados. Hay tres casos graves, y no hay sitio para ellos en los hospitales. Aquí les proporcionamos oxígeno y las medicinas necesarias, y el médico viene dos veces al día para controlarlos." SAMIRA JACOUB Enfermera de Beit Jala "En este tiempo también el personal y las enfermeras se han contagiado. Yo soy enfermera, y además de mi trabajo me ofrecí como voluntaria en la cocina, para echar una mano preparando la comida de los ancianos. Debemos ayudarles y deseo que se curen todos pronto." La Asociación Pro Terra Sancta apoya desde siempre a la Sociedad Antoniana para que pueda ser casa de acogida para los ancianos pobres pero también para familias en dificultad. Desde el inicio de la pandemia, Pro Terra Sancta ha renovado 15 estancias, dotándolas de equipamiento médico, como respiradores. Algunas de estas máquinas han servido también a casi cuarenta familias fuera de la Sociedad Antoniana. VINCENZO BELLOMO Responsable Pro Terra Sancta – Belén "Con esta nueva ola la Sociedad Antoniana se ha encontrado en grave dificultad porque no solo ancianos, sino también empleados y hermanas se han visto afectados por el virus, y esto ha creado una gran necesidad. No hacemos nuestro trabajo porque sea un proyecto, sino porque es una vocación, y cuando hay necesidad de ayudar, no nos lo pensamos dos veces. Es un poco como nuestra casa, el lugar donde nos ocupamos de los más pobres de Belén. Ponernos a su servicio es algo más que normal en este tiempo de necesidad." Esta nueva variante de la COVID-19 ha afectado a la ciudad de Belén. El coronavirus ha conseguido superar las rígidas medidas preventivas y contagiar a la franja de edad más frágil en la residencia de la Sociedad Antoniana. Agentes, voluntarios y las hermanas gianellinas tratan de resistir, en silencio y con valentía, a veces, desgraciadamente, a costa de sus propias vidas. Read More