Monte Nebo: 90 años de presencia franciscana

2023-07-21 14:17:59
El 20 de julio en el santuario memorial de Moisés, en el Monte Nebo, Jordania, Fr. Francesco Patton, custodio de Tierra Santa, presidió la santa misa en conmemoración del 90 aniversario de la llegada de los primeros frailes franciscanos a este lugar. Un santuario que es un tesoro que hoy muchos pueden admirar, gracias al servicio y dedicación de muchos frailes —especialmente los del Studium Biblicum Franciscanum— que a lo largo de los años han devuelto belleza y espiritualidad a este santo lugar. Un antiguo peregrino de este lugar decía: “Aquí se respira un clima terapéutico para el alma”. En su homilía, el custodio habló de Moisés como un hombre de Dios que intentaba hacer la voluntad de Dios, una vida que no fue fácil —prosiguió Fr. Patton— porque después de salir de Egipto caminó por el desierto y cuando estaba a punto de entrar en la Tierra Prometida sólo la vio de lejos. Por otro lado —subrayó el custodio— Moisés es un ejemplo de hombre que confía en Dios y hace lo que el Señor le ordena. Sobre su muerte, que tuvo lugar en esta montaña, según el Deuteronomio, el P. Patton cuenta una hermosa historia de tradición rabínica. Fr. FRANCESCO PATTON, ofm Custodio de Tierra Santa Moisés muere cuando Dios con un beso viene a tomar su alma. Con la muerte de Moisés, también nuestra muerte no es el final de todo, sino un momento de transición de la peregrinación terrena a la vida en Dios, y es hermoso imaginar que el momento de la muerte es el momento en que Dios toma nuestra vida con un beso para devolvérnosla eterna y para siempre. “El monte Nebo es el lugar ideal para mirar hacia Tierra Santa pero también el lugar ideal para reflexionar sobre el sentido último de esa peregrinación que es nuestra vida”.
A cada paso, a cada latido: San Nicolás, peregrino
A cada paso, a cada latido: San Nicolás, peregrino

San Nicolás Peregrino es un niño griego nacido en 1075, que conoció a Jesús con ocho años y al verlo recibió de él la oración de su corazón. Fue venerado como santo por los católicos y permaneció así durante aproximadamente nueve siglos. En 2023, los griegos ortodoxos de Italia lo incluyeron en su calendario litúrgico. Un santo verdaderamente ecuménico, que tiene tanto que decir a los peregrinos que hoy llegan a Jerusalén. Su vida está escrita en el libro de Mons. Natale Albino, diplomático de la Santa Sede.