ESPECIAL COLECTA “PRO TERRA SANCTA” – 13 DE SEPTIEMBRE DE 2020 Las colectas recogidas en todo el mundo el 13 de septiembre constituyen la “Colecta Pro Terra Sancta”, una ayuda que desde hace siglos se destina a los cristianos de Oriente Medio. En esta ocasión, acompañados por el custodio de Tierra Santa, Fr. Francesco Patton, les proponemos un especial dedicado a la historia y actividades de la Custodia, comprometida desde hace más 800 años en apoyar la presencia cristiana en la tierra de Jesús. HISTORIA, RAÍCES, MEMORIA Fr. FRANCESCO PATTON, ofm Custodio de Tierra Santa "Preservar la historia, custodiar la historia significa custodiar la memoria. El nuestro es un tiempo que vive mucho en el presente, y a menudo las personas, las elecciones que las personas hacen, las mismas comunidades, los mismos pueblos y naciones tienden a olvidar su propia historia, a perder sus raíces. La memoria, la historia, las raíces son fundamentales." Historia, raíces, memoria: Las de la Custodia de Tierra Santa se remontan más de 800 años. Cuando San Francisco de Asís mandó a sus frailes a constituir la “provincia de ultramar”. Poco después estos mismos frailes recibirían un mandato claro: Custodiar, en nombre de la Iglesia Católica, los santos lugares, testigos de la vida, muerte y resurrección de Jesús. Fr. FRANCESCO PATTON, ofm Custodio de Tierra Santa "Conservamos en el archivo documentos muy valiosos: bulas papales, incluida la bula de 1342 con la que el papa Clemente VI desde Avignon a la práctica instituye la Custodia de Tierra Santa, pero también bulas anteriores. Para nosotros tiene un doble valor: Por un lado recuerdan nuestra historia, por el otro tienen un valor muy concreto porque nos permiten documentar nuestra presencia… Incluso cuando, alguna vez, ha habido contenciosos que requieren poder exhibir documentos de por qué estamos aquí." Uno de los momentos clave de esta larga historia es el encuentro en 1219 entre San Francisco y el sultán de Egipto, Al Malek Al Kamel en Damietta, en el delta del Nilo. Mientras a su alrededor estallaba la V Cruzada, este diálogo pacífico entre dos mundos marcó profundamente el estilo de los frailes de la Custodia. Fr. FRANCESCO PATTON, ofm Custodio de Tierra Santa "Las indicaciones que Francisco da son posteriores al encuentro con el sultán. Sobre todo esa primera parte donde nos dice que “no nos metamos en querellas ni disputas” y que estemos al servicio de todos con una identidad cristiana clara me parece que es una indicación para nosotros, en el transcurso de ocho siglos, y que ha servido verdaderamente de modelo." LAS NUEVAS GENERACIONES La educación y el crecimiento de las nuevas generaciones son algunos de los campos a los que la Custodia de Tierra Santa dedica mayor atención. Una atención diaria que toma forma en las 15 escuelas que gestiona en cinco países, y a las que asisten más de 11.000 estudiantes y 1.100 profesores. Las escuelas son instrumentos fundamentales para garantizar a la población local la posibilidad de acceder a una formación cristiana —de otra manera imposible de encontrar en esta tierra— pero al mismo tiempo son lugares en los que vivir el encuentro con estudiantes y profesores de otras religiones y confesiones cristianas. Fr. FRANCESCO PATTON, ofm Custodio de Tierra Santa "En muchas de nuestras escuelas hay un fuerte componente musulmán, sin embargo conseguimos compartir, convivir. Con los cristianos de otras confesiones hacemos juntos la hora de religión: Y es una hora de religión cristiana, desde una perspectiva ecuménica, donde se aprende a conocer también algunas diferencias y particularidades que tiene una Iglesia respecto a otra." Fr. IBRAHIM FALTAS, ofm Director de las escuelas de Tierra Santa "Existe una bella convivencia y un hermoso diálogo ecuménico en nuestras escuelas. Vivimos esta convivencia prácticamente cada día." Una atención cariñosa, la franciscana, que no descuida ni siquiera a los estudiantes con necesidades especiales: Son acogidos en las escuelas para que puedan superar sus dificultades, y para poner una sonrisa en sus rostros. La pandemia del coronavirus no ha conseguido detener la actividad educativa franciscana. A través del aprendizaje a distancia, los profesores han conseguido eliminar las barreras del miedo y, a través de sus competencias, han continuado dando clase a los estudiantes, obteniendo resultados realmente satisfactorios. Las escuelas de Tierra Santa cubren todo el periodo de escolarización, desde la guardería hasta el instituto. La mayor parte de los estudiantes sigue después su carrera educativa en la universidad. Fr. IBRAHIM FALTAS, ofm Director de las escuelas de Tierra Santa "A menudo tenemos estudiantes que entran con tres años y los seguimos hasta que acaban sus estudios universitarios. Ofrecemos además muchas becas." GEORGE HLEIS "Acabé la universidad el año pasado… Justo ahí, en el Monte de los Olivos." El objetivo es claro: permitir a los cristianos locales estudiar en su propia tierra, evitar que decidan trasladarse al extranjero para formarse y después, tal vez, para vivir. Cada año se otorgan 500 becas completas, patrocinadas por dos programas diferentes que cubren todos o parte de los gastos escolares. Los destinatarios son estudiantes con un bajo nivel de ingresos familiares que mantengan una media de notas alta. Fr. PETER VASKO, ofm Custodia Tierra Santa - Fransciscan Foundation for the Holy Land "El 95 % de estos estudiantes ahora trabaja en el sector jurídico, médico, contable, de ingeniería… Y cuando vemos a jóvenes convertirse en profesionales, y estar verdaderamente agradecidos a la Custodia franciscana, nuestro corazón se llena de alegría." GEORGE HLEIS "A muchos chicos no les gusta la situación actual, querrían ir al extranjero para encontrar mejores oportunidades. Yo también lo he pensado, pero me gusta estar en la tierra en la que Jesús vivió." Fr. PETER VASKO, ofm Custodia Tierra Santa - Franciscan Foundation for the Holy Land "Es muy importante darse cuenta de que si queremos que los cristianos se queden aquí debemos darles una motivación, incentivos: Esta motivación e incentivos nacen de la posibilidad de acceder a la educación universitaria." Fr. FRANCESCO PATTON, ofm Custodio de Tierra Santa "Una de las escuelas, la escuela de música Magnificat, tiene la particularidad de ver juntos a judíos, musulmanes y cristianos. Y esto ayuda a entender todavía más el valor que tienen no solo los colegios, sino también las artes, porque a través de la música se crea diálogo, a través de la música y a través de lo que el papa Juan Pablo II llamaba “el camino de la belleza”, “el camino del arte”, llegamos a compartir valores y también a hacer juntos algo muy hermoso." Fr. ALBERTO PARI, ofm Director escuela de música “Magnificat” "Es un gran proyecto de la Custodia de Tierra Santa, y es una escuela abierta a todos: la mayoría de los estudiantes es cristiana, pero hay también musulmanes y judíos. Tenemos la gran esperanza de ver crecer a una generación de músicos sin fronteras." UNA CASA PARA LOS MÁS DÉBILES Las piedras y las personas, el aceite y la casa… y la gratitud hacia la misión de los frailes franciscanos. Igual que a mediados del siglo pasado la Custodia de Tierra Santa ofrecía en sus parroquias “pan y aceite” como ayuda diaria, hoy, a causa de diferentes exigencias de la población, proporcionar un alojamiento o vivienda para una vida digna se ha convertido en un medio para mantener viva la presencia cristiana en Tierra Santa. GRAZIELLA QAMAR Habitante de la Ciudad Vieja de Jerusalén "Esta casa es toda mi vida. Esta casa es un lugar especial para mí y no podría dejarla nunca. Mi hijo Musa intenta convencerme repetidamente que vaya a vivir fuera del país, pero siempre he rechazado absolutamente la idea." La Custodia de Tierra Santa ofrece más de 582 viviendas en Jerusalén, distribuidas dentro y fuera de la Ciudad Vieja, además de 72 casas en Belén, dando en total alojamiento a unas 2.050 personas. A día de hoy han llegado a más de 700 las peticiones de vivienda, de las que al menos 250 son urgentes. Los frailes franciscanos en Tierra Santa no se limitan a custodiar y conservar las piedras de estos lugares, sino que se ocupan también de las piedras vivas, es decir, de los cristianos locales, y especialmente de aquellos que pasan dificultades. Un ejemplo de este compromiso lo vemos en la Casa del Niño de Belén, fundada en 2007, que actualmente acoge a más de 24 chicos y adolescentes que se encuentran en condiciones especiales de exclusión social. JOSEPH SAYEH Belén "Mi padre está mal, tiene muchos problemas de salud y no trabaja. Gracias a Dios mi madre hace poco ha encontrado trabajo. Nuestra casa es muy pequeña y no cabemos todos en casa, pero gracias a Dios comemos, bebemos y estamos vivos." Los frailes franciscanos viven y trabajan en algunos de los contextos de crisis más difíciles del mundo, como Siria. La Custodia de Tierra Santa está presente también aquí, donde es incluso más fuerte el compromiso de permanecer junto a la población —la cristiana en particular— afectada por la guerra y por una grave crisis económica, por la persecución y la dificultad de ser minoría, que empuja a miles de personas a huir. Fr. FRANCESCO PATTON, ofm Custodio de Tierra Santa "También hay que tener en cuenta el dar la vida: Los frailes, a lo largo de la historia, lo han hecho de diferentes maneras, lo han hecho quedándose cuando había momentos duros de persecución, cuando había momentos de pandemia como la peste o el cólera. Actualmente nos encontramos en otro momento difícil, porque precisamente en Siria, al problema de la guerra y de la crisis económica se le suma el problema de la pandemia." La falta de un bien esencial como es una vivienda se ha hecho más patente en las últimas semanas en la capital libanesa de Beirut, donde la terrible explosión de agosto que destruyó la zona entorno al puerto ha generado 300.000 desplazados. La Custodia, presente en Líbano con cuatro conventos, está haciendo lo posible para contribuir activamente a la reconstrucción. En Siria, desde 2017 la Custodia ayuda a la población local a reconstruir o a rehabilitar las casas afectadas por la larga guerra comenzada en 2011. Lo hace en pequeñas ciudades a través de los párrocos, y especialmente en Alepo en colaboración con la Asociación Pro Terra Sancta, donde ya se han rehabilitado 700 casas. Tras la explosión el edificio enteró se derrumbó, no quedó nada. Por suerte en ese momento nos encontrábamos con los vecinos. No pudimos salvar nada de nuestra casa. Huimos y alquilamos otro apartamento. Estábamos en casa cuando el muro cayó. Era la una de la tarde… un viernes… en 2013. Inmediatamente después del colapso salimos corriendo. Ahora somos felices, muy felices. SANTUARIOS Y PEREGRINOS Pero la primera y fundamental misión para los franciscanos es siempre la misma: custodiar los Santos Lugares. Son 80 los santuarios presentes en las actuales fronteras de Israel, Palestina, Jordania y Siria. Fr. FRANCESCO PATTON, ofm Custodio de Tierra Santa "Debemos recordar siempre el mandato del papa Clemente VI de 1342, que nos pide que estemos en los santuarios, que habitemos los santuarios." Del Monte Nebo, lugar desde el cual Moisés contempló la Tierra Prometida… …a los santuario de la vida, pasión y muerte de Jesús. Jerusalén es considerada el corazón de Tierra Santa. En el Monte de los Olivos, los santuarios de la Pasión: el llanto y lamento de Jesús sobre Jerusalén se conmemoran en la iglesia del Dominus Flevit, que nos regala una de las panorámicas más impresionantes de la Ciudad Santa. Unos metros más abajo, junto al huerto de los olivos, encontramos la Basílica de Getsemaní, lugar donde Jesús rezó la noche del Jueves Santo, antes de ser arrestado. En el interior de los muros de Jerusalén los peregrinos recorren las 14 estaciones del Viacrucis. Una práctica iniciada por los franciscanos en el siglo XVII y que se repite cada viernes hasta el día de hoy. Pero Jerusalén tiene para los cristianos un corazón: la Basílica del Santo Sepulcro, donde se encuentra el Calvario y la Tumba de Cristo. La apertura de la Basílica tiene lugar muy pronto, a las 4 de la mañana: las tres comunidades cristianas responsables —la católica o latina, representada por los frailes franciscanos, la greco-ortodoxa y la armenia— abren juntas las grandes puertas: Día y noche celebran por turnos en los diferentes puntos de la iglesia y en los espacios comunes, como la tumba y el calvario. Sin embargo, tras años de un fuerte crecimiento, en 2020 el número de peregrinos ha caído a cero a causa de la difusión del coronavirus y del consiguiente cierre de fronteras: Ni un solo grupo en Tierra Santa, ni una cola para acceder a los santuarios, que durante un largo tiempo han permanecido cerrados a los fieles y que ahora se presentan prácticamente vacíos… igual que las calles de la ciudad. Fr. SALVADOR ROSAS FLORES, ofm Presidente Convento Santo Sepulcro "La esperanza nos acompaña siempre, a pesar de que la puerta estuviera cerrada… La esperanza de abrirla, de recibir nuevamente a los cristianos, de mostrarles los Santos Lugares, de llevarlos nosotros mismos al interior. Esta esperanza permanece intacta en nosotros los frailes, entre los cristianos. Sin duda debemos ser prudentes, ya que el Señor nos lo pide. La esperanza crecerá con el tiempo." La red de Casas Novas paga las consecuencias de la pandemia. Se trata de albergues gestionados por la Custodia creados para acoger a un número de peregrinos que en las últimas décadas ha ido creciendo. Fr. IBRAHIM FALTAS, ofm Director Casa Nova – Jerusalén “Casa Nova, la casa para peregrinos. Casa Nova es el lugar preferido por los peregrinos que vienen a visitar Tierra Santa, los Santos Lugares. Tenemos Casas Novas en Jerusalén, Belén, Nazaret, Tiberíades, Monte Tabor y en Ein Karem: Todas ellas acogen a los peregrinos que vienen aquí”. Buena estructura de acogida, habitaciones con baño, restaurantes: El edificio de la Casa Nova de Nazaret, como el resto, ha ofrecido siempre servicios de calidad a los peregrinos. Desde el 11 de marzo, a causa de la pandemia, está completamente vacío. Fr. CARLOS MOLINA, ofm Director Casa Nova - Nazaret “Significa que no hay entradas económicas para la Casa Nova. No ha habido para las obras de la Custodia, ni para el sustento de los santuarios, pero sobre todo no ha habido ingresos para los trabajadores de la Casa Nova.” ELIANA GHAWALI Responsable de reservas Casa Nova (Belén) "Este año tenía que venir muchísima gente, ¡teníamos overbooking! Lamentablemente en marzo tuvimos que cerrar por el coronavirus, y desde entonces la casa permanece cerrada, no hemos vuelto a trabajar.” Fr. SEVERINO LUBECKI, ofm Director Casa Nova - Ein Karem "Está claro que no se puede abandonar el edificio: Se debe mantener, debe limpiarse cada día, en su interior hay que hacer el mantenimiento ordinario." Fr. FRANCESCO PATTON, ofm Custodio de Tierra Santa "Somos una orden mendicante como franciscanos, por lo que San Francisco nos enseñó que debemos pedir con confianza y recibir con gratitud. También damos cuenta de lo que recibimos, porque en la web de la Custodia, en la web de los comisariad os de Tierra Santa, en la web de la Congregación para las Iglesias Orientales cada año se publica el listado de obras que hacemos en buena parte gracias a la Colecta del Viernes Santo, o la Colecta Pro Terra Sancta que este año tiene lugar el 13 de septiembre. Por ello pedimos cada año ayuda, apoyo económico a todos los cristianos del mundo, y luego agradecemos lo que los cristianos de todo el mundo nos dan como expresión de su cercanía, de su solidaridad y de su amor."