Los cristianos orientales celebraron, el 6 de enero, la Navidad. La jornada comenzó con la entrada solemne —acompañado por grupos scout— de Mons. Gabriel Daho, vicario para Jerusalén y Jordania del patriarcado ortodoxo sirio, seguido por la de Mons. Anba Antonios, arzobispo ortodoxo copto de Jerusalén y de Oriente Próximo. El momento más esperado fue la llegada de Su Beatitud Teófilo III, patriarca greco ortodoxo de Jerusalén. El día acabó con la entrada solemne de Mons. Enbakom, vicario patriarcal de la Iglesia ortodoxa etíope de Jerusalén. Mons. GABRIEL DAHO Arzobispo vicario Patriarcado ortodoxo sirio "El nacimiento del Salvador, el nacimiento del Rey de la Paz es una ocasión importante. Ha venido para la paz, y esperamos que la paz permanezca en todo el mundo. Sobre todo en estas difíciles condiciones, y con la difusión de la epidemia, debemos estar preparados también espiritualmente. Esperamos que 2021 sea un año de esperanza y de paz para el mundo entero." Mons. ANBA ANTONIOS Arzobispo del Patriarcado ortodoxo copto de Jerusalén y de Oriente Próximo "El mensaje de Cristo para todo el mundo en esta fiesta es un mensaje de paz, y le pedimos: “Rey de la paz, danos la paz”. Estamos atravesando tiempos difíciles con la difusión de la pandemia. La mayor parte de los habitantes de esta ciudad depende del turismo y a causa del confinamiento muchos están sin trabajo. Pedimos a Dios que venza la pandemia y traiga la alegría a esta tierra." TEÓFILO III Patriarca greco ortodoxo de Jerusalén "Pedimos a Nuestro Señor Jesucristo salud, fuerza y sabiduría para poder continuar nuestro camino unidos." Las celebraciones de este año, incluida la Misa de Medianoche, se han limitado solo a los ritos religiosos, a causa de las restricciones impuestas por la pandemia del coronavirus. SIMON AWWAD Belén "No hay alegría, la pandemia ha afectado a las personas psicológica y económicamente. En el 2000, durante la Intifada, no nos vimos afectados como ahora. Esperamos que este año, y con la Navidad, la pandemia acabe y que sea un año de bienes para todos. Lo más importante es que nos amemos mutuamente, y nos deseemos amor, solo amor." Este año la Navidad ha llegado para todos en condiciones muy difíciles que están afectando tanto a los habitantes de Tierra Santa como a todo el mundo, pero lleva consigo la esperanza de que la luz prevalezca sobre las tinieblas y la enfermedad.